Viernes, 24 Enero 2014
18:00
Biblioteca Gregorio Mayans
(Valencia)
Club de Lectura "La Torre"
PROGRAMA 2014
Libros con música
Charles
Dickens escribió este Cuento de Navidad en seis semanas, por encargo, y sería el primero de
una serie de libros anuales de Navidad.
Llegó a las librerías el 17
de diciembre de 1843 y fue un rotundo éxito; en plena época Victoriana (que no
conoceríamos tan profundamente como lo hacemos hoy si no fuera por Dickens).
El
contexto, un tiempo donde la navidad comenzó su transformación más profunda,
cuando, pese a que la nostalgia por una celebración clásica todavía imperaba en
la sociedad, comenzaban a expandirse tradiciones modernas y “paganas” como la
del árbol de navidad o las postales de felicitación. Un momento, además, donde
el capitalismo industrial comienza a tomar poder en Reino Unido, una clase a la
que se critica profundamente en el relato.
Como
en todas sus novelas el trasfondo social (Reino Unido de la revolución
Industrial del S.XIX) goza de tanto significado como los personajes, ya que, Dickens
adquiere un compromiso social, al describir la Navidad como un tiempo en el que
las diferencias sociales se hacían más agudas. Una época del año en la que “la necesidad
se sufre con mayor intensidad y más alegra la abundancia” porque
mientras los burgueses y nobles viven rodeados de lujos, los pobres siguen
sufriendo penurias. Sus historias navideñas pretenden que la sociedad inglesa
tome conciencia del desarraigo de las clases trabajadoras y les dé protección.
Nos cuenta la historia de Ebenezer
Scrooge, un hombre avaro y tacaño que no celebra la Navidad. Éste recibe la visita
del espíritu de su antiguo socio, Jacob Marley, muerto hace unos años, que le
explica por qué es un fantasma obligado a arrastrar una pesada cadena por toda
la eternidad, y le dice que se le aparecerán, sucesivamente, 3 fantasmas.
Cada
uno de los tres fantasmas representa las Navidades pasadas, las presentes y las
futuras y le hacen ver escenas que le harán cambiar su forma de ser.
Trata de cómo
una persona huraña o tacaña puede cambiar su actitud durante la Navidad.
Como podemos
cambiar el rumbo de nuestro destino cambiando nuestros pasos o modo de actuar.
Sobre la
libertad para decidir nuestra actitud ante la vida.
La
obra se divide en tres partes:
1. Prefacio, que narra como Scrooge se
muestra como un viejo avaro que no celebrala Navidad
2. Espíritus
- El del Pasado, muestra a Scrooge antes de ser avaro, en la soledad sufrida en la niñez y la soledad elegida en la juventud, cuando renuncia a su unión sentimental con su novia.
- El del Presente, cuenta cómo se celebra la Navidad en el hogar de su empleado, que es feliz con su mujer y los niños.
- El del Futuro, presenta la tragedia de su muerte en soledad y cómo lo despojan de todo, porque no inspira un sólo sentimiento de ternura entre los que lo conocieron.
3. Conclusión: relata el cambio de Scrooge
cuando celebra la Navidad
con alegría. Muestra como el amor y la solidaridad producen una alegría
gigantesca.
Los personajes:
- Ebenezer Scrooge es el personaje principal. Un hombre de negocios, avaro y tacaño. Solitario y adicto al trabajo.
- El fantasma de Jacob Marley, su antiguo socio.
- El fantasma de las Navidades Pasadas, representado por un niño o persona “en perspectiva”.
- El fantasma de las Navidades Presentes, representado por un hombre alegre que va envejeciendo rápidamente y termina mostrando la Ignorancia y la Necesidad, como dos niños que emergen de su túnica.
- El fantasma de las Navidades Futuras, representa la muerte. No tiene rostro, sólo una mano que guía e indica.
Es un cuento, relato corto escrito con un estilo natural y didáctico.
Un narrador omniscente se dirige al lector cuando es necesario para hacerle profundizar en lo que se le está representando en la ficción.
La descripción de los personajes es muy rica en detalles y presenta unas imágenes coloridas y brillantes, o muy oscuras, si es necesario.
Conclusiones
y opiniones personales
Dickens defendía una actitud más benévola y caritativa con los niños, pues las condiciones en la era victoriana les eran adversas, con altos indices de prostitución, mendicidad, trabajo infantil...a consecuencia de la industrialización y el colonialismo británico.
Las novelas de
Dickens eran, entre otras cosas, trabajos de crítica social. Era un fiero
crítico de la pobreza y de la estratificación social de la era victoriana. En
un tiempo en el que Gran Bretaña era el mayor poder político y económico del
mundo, el autor destacó la vida de los pobres olvidados en el corazón del
imperio.
Inmediatamente
después de su publicación, la obra tuvo un éxito rotundo en su país como en el
resto del mundo. Con ello revivió la
Navidad en el Reino Unido, que había estado prohibida.
Existen
numerosas versiones y adaptaciones de dibujos animados, cine, radio,
televisión... Son numerosas las adaptaciones cinematográficas. La primera data
de 1901
La historia
apela a la compasión y al remordimiento para despertar un sentimiento de amor
al prójimo. El autor pretende imbuir en el lector una actitud respetuosa con la Navidad, y además, hacerle
meditar sobre el sentido de la vida y las consecuencias de nuestros actos.
Si nos
retrotraemos más allá de la era cristiana, a las festividades paganas del
solsticio, el renacer del niño-dios o el sol de la oscuridad invernal con el
aumento de la luz y la claridad, el relato nos hace reflexionar sobre lo vivido
en el año (o en nuestra vida), para lograr un renacer interior y mejorar
nuestra conducta en el año que se inicia.
El miedo del
ser humano a enfrentarse con sus circunstancias, que puede forzarnos a un
cambio radical en nuestras actitudes. La historia trata de enseñar que el
destino del hombre no es inamovible, sino que se construye día a día. De modo
que, pudiendo cambiar el camino se puede modificar el final.
La novela nos
envía un mensaje de esperanza y la posibilidad de cambio en un mundo sumido en
el hambre, el frío y la desolación.
Hoy en día, Cuento
de Navidad está más cerca de nuestra realidad que nunca. Una lección de
vida que nos invita a que el espíritu navideño se extienda a cada día del año.
Un momento especial para enfrentarnos a nuestros fantasmas con el fin de que el
cambio sea profundo y nuestra solidaridad y buena voluntad no dure solamente 15
días.